¿Cómo funciona el chicle de nicotina?

Hay bastantes métodos para , sabemos que el más eficaz es el cigarrillo electrónico, pero hay muchas personas que también están familiarizadas con los productos de reemplazo de nicotina tales cómo el chicle de nicotina, el cual a través del chicle ofrece una cantidad de nicotina al cuerpo.

Para saber más acerca de este método alternativo, venimos a resolverte las dudas más frecuentes sobre este.

¿Cómo funciona?

El chicle consta de una goma de mascar mezclada con nicotina. La masticación del chicle libera nicotina, la cual se absorbe a través de la mucosa de la boca y en el torrente sanguíneo.

El uso del chicle puede ayudar a reducir los síntomas de abstinencia cómo la ansiedad y la irritabilidad. Sin embargo, los síntomas pueden no ser detenidos por completo.

¿Cómo se usa?

Espera al menos 15 minutos después de comer o beber antes de usar este chicle, ya que si lo utilizas antes reducirá la absorción.

Debes masticar el chicle hasta que se vuelva suave y produzca una sensación de hormigueo o sabor a pimienta. A continuación, el chicle debe ponerse escondida entre los dientes y las encías hasta que se detenga el hormigueo.

Cuando se detiene el hormigueo, el chicle se mastica de nuevo hasta que retorna la sensación, a continuación, mételo en una nueva ubicación. Estos pasos deben repetirse hasta que el chicle se haya quedado sin nicotina, lo cual supondría aproximadamente 30 minutos desde que se introduce en la boca o hasta que hayan desaparecido los ansiedad por fumar.

Los fumadores ligeros deben utilizar el chicle de 2mg,los fumadores más asiduos deben utilizar el chicle de 4 mg. Cuando se utiliza correctamente, los 4mg se convierten en 3 mg de nicotina que absorbe el torrente sanguíneo mientras que para el chicle de 2mg sólo 1mg pasa a la sangre.

¿Puede darse una sobredosis de chicles de nicotina?

Si masticas demasiados chicles de nicotina, pueden producirse síntomas de sobredosis.

Los síntomas de sobredosis pueden incluir:

  • Dolor de estómago
  • Sudores fríos
  • Diarrea
  • Dificultades respiratorias
  • Problemas de audición
  • Mareo
  • Agotamiento
  • Desmayo
  • Dolor de cabeza
  • Presión arterial baja
  • Confusión mental
  • Náuseas
  • Un pulso rápido e irregular
  • La producción de exceso de saliva
  • Vómitos