CIGARRILLO ELECTRONICO SIN NICOTINA

Debido a la prohibición de fumar en lugares públicos, muchos fumadores se han visto obligados a dejar este hábito o bien fumar en la calle o espacios reducidos destinados a este fin. Sin embargo, recientemente ha aparecido un producto en el mercado especialmente diseñado para fumadores que quieren dejar paulatinamente el tabaco o para los que quieren fumar tranquilamente en espacios públicos sin miedo a ser amonestados.

Este producto se llama , o , y aunque ya se comercializa en varios países como China, Israel, Turquía o Australia todavía hay muchos lugares, como España, en los que sólo es posible conseguirlos a través de Internet o en contados lugares.

Por todos es sabido que la nicotina es una sustancia química contenida en el tabaco que es altamente adictiva; la hacemos pasar a nuestros pulmones cuando inhalamos un cigarrillo, y posteriormente se traslada al torrente sanguíneo, extendiéndose por todo el cuerpo, y llegando finalmente al cerebro donde se libera la dopamina. Con el tiempo, se necesita una dosis mayor de nicotina para llegar a los mismos niveles, lo que provoca la adicción. Pero a pesar de esto, la nicotina no es la peor de las sustancias que encontramos en los cigarrillos tradicionales, hay más de cuatro mil elementos cuyos componentes son altamente cancerígenos, como el monóxido de carbono o el alquitrán.

Por tanto, el cigarrillo electrónico es un magnífico aliado para abandonar el hábito del tabaco poco a poco, dejando de esta forma la adicción a la nicotina. El cigarrillo electrónico se puede comprar con cartuchos de diferentes sabores, sin nicotina, e incluso hay packs de cartuchos que contienen menor grado de nicotina en dosis progresivas para que el fumador pueda sentirse aliviado progresivamente hasta que consiga utilizar los cartuchos que no contienen ningún elemento nocivo.

Como ya se ha señalado, los cartuchos para cigarrillos electrónicos sin nicotina tienen infinidad de sabores para disfrutar sin ningún tipo de toxicidad, tales como café, menta, frutas (limón, naranja, cereza, fresa), chocolate e incluso tabaco. Estos cartuchos sin nicotina, dependiendo del tipo de cigarrillo, pueden variar desde las cuarenta a las cuatrocientas caladas, cuando en un cigarrillo normal no tenemos más de doce caladas a lo sumo. Por lo tanto, aquí se puede valorar el ahorro sustancial que el consumidor realiza al adquirir uno de estos artilugios.

Estos cartuchos poseen una pequeña pieza de material absorbente que está impregnada con los diferentes sabores que el consumidor quiera experimentar. Se sitúan en la parte superior del cigarrillo electrónico (lo que en el tradicional correspondería al filtro), y está en contacto con el atomizador, proporcionándole al mismo la humedad suficiente para producir el vapor que será inhalado. El cartucho se puede encontrar en dos variedades, el cilíndrico o pico de pato; este último es el más utilizado por los e-fumadores, ya que, por ejemplo, su particular forma permite que la inhalación sea mejor porque no se permite la entrada de aire por otro lugar que no sea la boquilla. Los se suelen vender en cajas de cinco unidades, y cada uno de ellos equivale a unos doce o quince cigarrillos; de este modo, con cada caja de cartuchos es como si compráramos unas tres cajas y media de tabaco, lo que nos supone un sustancioso ahorro tanto económico como en salud.