Dejar de fumar con acupuntura

es el sino de muchas personas, es un problema para algunos, y una solución para otros. Sin embargo, un elemento imprescindible a la hora de dejar de es la voluntad. Hoy día, en que hay 5 millones de muertes al año por culpa del tabaco, en todo el mundo, dejar de fumar puede ser la solución y formas de hacerlas hay muchas.

Una de esas formas es la acupuntura, es decir, el uso de las agujas aplicadas en el cuerpo para .  Es una técnica que se está utilizando desde hace ya mucho tiempo, los más expertos hablan de principios de los años 70 donde, además, se avala con multitud de estudios que se han realizado a este tratamiento para saber si era algo que tenía éxito (como así es) o no.

Lo habitual es conseguir dejar de fumar con solo 2-3 sesiones aunque se pueden necesitar más (no es lo habitual pero si es un fumador que fumaba mucho, quizás las sean persistentes y, para evitar la recaída, se dan un par de sesiones más para quedar completamente sanado).

Lo que hacen es utilizar unas agujas muy finas que son clavadas en determinadas partes del cuerpo (no cualquiera sino en ciertas zonas que pueden estar relacionadas con los nervios o la mente) para, con la presión, conseguir que la persona no tenga deseos de fumar ni tampoco quiera hacerlo después a pesar de ver a otros hacerlo.

Eso sí, se requiere que sea la propia persona la que quiera dejar de fumar ya que, si no está seguro o no quiere hacerlo, no se puede conseguir de forma adecuada (se podría dejar por un tiempo pero al final volverá a recaer). De hecho, una vez aplicado el tratamiento, la fuerza de voluntad de la persona es la que sostendrá el volver o no a fumar.