Cuando vas a iniciarte en el mundo de los cigarrillos electrónicos lo más lógico es que puedas saberlo ya todo sobre ellos debido a amigos, familiares o simplemente a internet porque hayas estado buscando información. Sin embargo, ¿lo sabes todo de verdad?
¿Qué hay dentro de un cigarrillo electrónico?
Lo cierto es que hay muchos cigarrillos electrónicos con diferentes tamaños y funcionalidades. No todos se pueden encontrar en España, hay otros que sólo se han quedado en América donde el furor por los cigarrillos electrónicos es aún mayor.
Un e-cigarrillo es parecido a un cigarrillo de tabaco pero viene además acompañado de una variedad de colores, sabores y acabados. También lleva algunos accesorios que pueden estar de moda (algo que en los cigarrillos no se dan).
En general tienes dos tipos de cigarrillos electrónicos, recargables o desechables. Ambos lo que hacen es calentar el líquido de nicotina mezclado con una infusión hasta que se vaporiza. Es ese vapor lo que inhalas satisfaciendo así la ansiedad por la nicotina y las ganas de fumar.
Por su parte, los desechables se tiran una vez que los has usado mientras que se diferencian de los recargables en que, al llevar unas baterías, los puedes utilizar una y otra vez.
La elección de uno u otro va a depender mucho del hábito de fumar que tengas. Por ejemplo, si necesitas fumar varias veces al día entonces lo más normal es que tengas uno recargable, o incluso dos, mientras que, si no fumas mucho, con los no recargables o desechables tendrás.
En general, un cigarrillo electrónico se compone de: el propio cigarrillo, un atomizador, los líquidos para vapear que pueden ser variados y que encontrarás con nicotina (los primeros que se suelen consumir) y sin nicotina para tenerlo más como ocio que por otra cosa; y las baterías en caso de ser recargable.